Debido al cansancio que arrastro de los últimos días, hoy me quedé dormido hasta tarde. Gracias a Dios que el bullicio peatonal de la Calle Ancha me despertó a las 10:00 A.M. y rápidamente me preparé para empezar mi Camino. Algo inusual para un peregrino comenzar a caminar a éstas horas. Desayuné un pan con tortilla de chorizo y café con leche en la Cafetería Paris y me despedí de esta bella ciudad de León.
Saliendo de León.
San Marcos.
La historia de este edificio se remonta al siglo XII, en que sirvió como hospital de peregrinos y casa madre de los Caballeros de Santiago. La fachada que hoy conocemos, de estilo plateresco, data sin embargo del siglo XVI, aunque conserva en su decoración memoria de aquellos usos, simbolizados en las numerosas conchas que adornan la portada de la iglesia. La última incorporación arquitectónica al conjunto se produce en el siglo XVIII, cuando se añade un cuerpo barroco a la fachada. Desde sus orígenes, este monumento ha tenido usos tan diversos como Hospedería de Peregrinos, Escuela de Veterinaria, Cuartel de Caballería o prisión, siendo su más renombrado recluso Don Francisco de Quevedo, en el siglo XVII. Hoy en día es Parador Nacional de Turismo.
Espadaña de la Iglesia Parroquial.
Puente de Orbigo.
El puente de origen romano es uno de los más antiguos y famosos de la ruta jacobea. Ha soportado diversas modificaciones y ampliaciones a lo largo de los siglos, terminando con los 19 ojos que en la actualidad tiene.
Llegué a Hospital de Orbigo bastante tarde y bajo la amenaza de fuertes lluvias en la tarde. Entrando al pueblo me di cuenta de la cantidad de motocicletas que habían por todo el pueblo. Me detuve en varios hostales y hoteles, y todos estaban a capacidad debido a que se celebraba ese fin de semana "Bike Week". Varios peregrinos que me encontré, me comentaron que todos los albergues estaban llenos desde las primeras horas de la tarde. Después de estudiar el mapa del pueblo, decidí atravesar hasta la salida del pueblo, por la Carretera Nacional-120 donde se encuentra el "Hotel Paso Honroso". Llegando me encontré el hotel repleto de motocicletas. El empleado de turno en la recepción me explicó que estaban a capacidad pero que el me ayudaría a buscar refugio para esa noche. Después de llamar a varios hoteles, hostales, pensiones y albergues, el hospitalero del Albergue Parroquial de Peregrinos me ofreció refugio, pero tendría que dormir en el piso pues ya no le quedaban plazas. Le acepté la oferta y me fui de regreso al pueblo buscando el albergue. Al llegar y presentarme al hospitalero en la entrada, me ocurrió algo muy gracioso. En la entrada del albergue hacia la izquierda se encuentra el escritorio del hospitalero y detrás del escritorio hay unas ventanas. Hablando con el hospitalero, un señor español de edad, muy chistoso y gracioso, oía que unas voces muy misteriosa me llamaban por mi nombre desde las ventanas, pero yo no conseguía ver quienes eran. Presentando mi credencial de peregrino y llenando el formulario, aún podía escuchar voces llamandome pero ésta vez era una voz femenina con un acento cubano muy fuerte, ya llegando a lo exagerado. Me sorprendí pues desde que había empezado a caminar en Francia, hacía varias semanas, no me había topado con ningúna cubana. El hospitalero me dirigió al area donde pasaría la noche y al llegar me llevé la sorpresa de encontarme con Besnd y una chica muy graciosa de San Sebastián llamada Mercedes, la cual era la que imitaba el acento cubano. Desde ese día tuve la suerte de caminar varias etapas con Mercedes, las cuales fueron muy interesantes y divertidas, por su energía contagiosa y los interesantes debates políticos que tuvimos en muchas etapas.
Albergue Parroquial de Peregrinos.
Cenando con Besnd y Mercedes.